A la sociedad le gusta mucho criticar, sobretodo criticar a la gente que desde mi punto de vista es muy valiente, gente que es distinta y a la que no le da miedo decirlo. Sí, estoy hablando de los homosexuales. Que desde mi punto de vista son las personas más valientes. Son personas con las que la gente se mete porque según la sociedad son raros, pero ¿quién es la sociedad para decir que alguien es raro? Es decir, ¿de qué sirve criticar a alguien por el motivo de que le gusta una persona de su mismo sexo? ¿No dicen que lo importante es que la persona te guste y te haga feliz? ¿Entonces? ¿Qué hay que criticar? ¿La presencia de amor?
Creo que la sociedad está muy equivocada. No se debe criticar lo que es distinto por ser distinto. Creo que deberíamos ser tolerantes, y respetuosos con esa gente distinta a nosotros. Porque seguramente, esas personas lo hayan pasado mal pensando en el qué dirán, y la sociedad para demostrar que es miserable y ruin hace sus vidas más difíciles.
Por ellos, por nosotros, por la sociedad, para que esto cambie y nadie sea herido una vez más.
tragedias de sueños perdidos
jueves, 6 de noviembre de 2014
Críticas
domingo, 26 de octubre de 2014
El mundo real
Pero volvió a la vida, sin saber como volvió a sentir la vía en su brazo, volvió a sentir los recuerdos que la torturaban, volvió a la realidad que lentamente la mataba.
Y abrió los ojos, los abrió como platos sorprendida de seguir ahí. ¿Porqué no estaba muerta? ¿Porqué no se había cumplido su ansiado deseo?
Estaba ahí atada a la vida, como una triste marioneta atada para que la manejen, pero esta vez no, no iba a volver a la vida, porque ella iba a morir.
viernes, 11 de abril de 2014
Estás solo y no sabes como reaccionar a quien pedir ayuda. De hecho, solo hay una persona que te puede ayudar, pero ni si quiera te habla, solo una persona puede hacerte ver las cosas de otra manera, pero esa persona ha desaparecido por completo de tu vida, y aunque ella no sea la causa de tu dolor sabes que es la única que lo puede arreglar. Sabes que esa es la realidad pero no la quieres aceptar. No tienes los cojones para llamarla por teléfono y decirle "Te necesito" "Estoy mal". Por que temes que te diga "Ya te lo dije" esas cuatro palabras tan dolorosas que te recuerdan que la has cagado y que estabas advertido.
Te sientes culpable por caer una y otra vez pero no sabes como hacerlo para que no vuelva a pasar. Tratas de pensar que no ha pasado nada, que estás bien,que tan solo ha sido un error más.
sábado, 18 de enero de 2014
Puta Adicción
Todos y cada uno de nosotros somos adictos a la vida y a algo de esta, todos tenemos ese "algo" que nos ata y nos tiene presos en algún lugar,o junto a alguna persona, todos tenemos algo que amamos y odiamos a la vez.
Quien lo diría que el ser humano, el único animal racional pudiese ser tan irracional algunas veces, nos acercamos a lo que nos hace daño, somos capaces de dar la vida por alguien que ni si quiera se molestaría en mover un dedo por nosotros, repetimos el mismo error, no una y dos veces, sino quince o veinte veces para asegurarnos de que eso es lo que está mal. ¿Cómo podemos considerarnos entonces los únicos seres inteligentes, si, en realidad somos los más tontos?
Todos somos capaces de jurar una y mil millones de veces, que no tenemos adicciones, cuando en realidad, mientras lo negamos la tenemos en nuestra cabeza, tenemos en nuestra cabeza esa puta adicción que no nos deja en paz ni un segundo, todos tenemos esa adicción, que, por mucho que lo intentemos nunca dejaremos de tener en la cabeza, que sabemos que es imposible, pero somos capaces de intentarlo mil millones de veces, y la realidad es, que nunca las dejaremos por completo, pues, llegará el día, en el que creeras que la has olvidado, pero, entonces esa puta adicción volverá a pasar durante un breve lapso de tiempo por tu cabeza, el tiempo suficiente, como para saber que no la has olvidado, que nunca la olvidarás.
lunes, 30 de diciembre de 2013
La Guerra
miércoles, 24 de julio de 2013
La bella y la bestia
Ella era una dama, una princesa. La típica que siempre va arreglada con camisa y tacones. Él, era todo lo contrario, siempre decantaba por unos simples vaqueros y alguna camiseta básica.
Pero tenían algo en común. Estaban locos el unos por el otro. Ni si quiera podían pasar un par de horas sin hablar el uno con el otro. Ambos eran una droga para el otro. Ellos se necesitaban, como cualquier adicto a los narcóticos necesita su droga, ellos necesitaban estar juntos. Y nada ni nadie podía evitarlo. Ellos se necesitaban y se querían, nadie podía contra decirlo o ponerlo en duda; de hecho era algo que podía verse a kilómetros de distancia. La mirada protectora de él siempre se juntaba con la juguetona de ella. Nadie hubiera apostado por ellos, pero el destino lo hizo, el destino los juntó y en algún momento se encargará de separarlos cuando llegue el momento.